Movilización Misionera

Tareas Principales en la Movilización Misionera

Antes que todo, tenemos que reconocer que Dios está trabajando entre nosotros. El trabajo de la movilización misionera no es producto del trabajo de los hombres. Dios es El que moviliza. Simplemente, Dios nos permite unirnos a lo que Él ya está haciendo. Hay pasos, o tareas, que como hombres podemos implementar, pero el cumplir con los pasos 1, 2, 3, etc., no garantiza que la iglesia brasileña será movilizada exitosamente. Por eso, la primera tarea en la movilización es: Movilizar la oración en pro de la movilización en sus dos facetas (misioneros e iglesias)Movilización Misionera

Casi siempre cuando hablamos de la oración en relación con las misiones, hablamos de movilizar la oración en pro de los grupos no alcanzados, o en pro de los misioneros nuestros. Pero hay un paso previo a todo eso, un paso que hay que implementar al puro principio del trabajo de movilización. Hay que movilizar la oración a favor de la movilización. Suena repetitivo ¿no? pero es importante reclutar a gente para que ore por el trabajo de la movilización.

Quiero dar un pequeño testimonio sobre cómo Dios empezó a trabajar en nuestras vidas sobre la movilización misionera . . . aunque en aquel entonces no sabíamos nada sobre esa idea de la movilización.

Ilustración – Cómo Dios utilizó Deuteronomio 3:27-28 en nuestras vidas para llevarnos a México y cómo empezamos a pedirle a la gente que orara para que Dios levantara una fuerza misionera desde México.

Ilustración – En mi planeación anual actual tengo dos metas que tienen que ver con levantar a un grupo de personas que intercedan por la movilización en sí: Meta I.2.2 y I.2.4 – Reclutar a por lo menos 70 personas de mis Redes de Oración para que oren específicamente para la movilización misionera en Mesoamérica y el Caribe, y para que Dios levante una ola enorme de misioneros latinoamericanos para los pueblos no alcanzados.

Sólo Dios puede despertar a las iglesias. Sólo Dios puede crear visión en los pastores y en las iglesias. Sólo Dios puede llamar a personas a las naciones. Por eso, hay que reclutar a personas que estén orando primero para la preparación del terreno.

Esto es diferente a la oración por los misioneros, o por los pueblos no alcanzados. Es pedir que Dios levante a un grupo de hombres y mujeres dispuestos a dar de su tiempo y de sus recursos propios para movilizar a la iglesia hacia el mundo.

Estamos pidiéndole a Dios que levante a un Equipo de Movilización en México, a otro Equipo en Centroamérica, y a otro en el Caribe. . . . serán personas que se ocuparán en promover las misiones, en discipular a las iglesias en el campo de las misiones, en trabajar con los candidatos para que haya seguimiento a todas esas decisiones donde dicen “Dios me está llamando a las misiones”.

Después de esta serie de conferencias sobre la movilización misionera sería bueno que como Junta de Misiones ustedes tomaran alguna decisión sobre cómo quieren implementar la movilización – o posiblemente será más bien cómo organizar mejor las varias cosas que están haciendo ya en lo que es la movilización —  : ¿qué estructura habrá? ¿Quiénes serán los responsables por este tipo de trabajo? Estas personas deben empezar a reclutar a personas para interceder a favor de la movilización en las iglesias.

Creación de Visión

Movilizar a las iglesias sigue con la creación de la visión misionera en nuestras iglesias. ¿Cómo se crea la visión misionera? Otra vez, la creación de la visión misionera es algo que sólo Dios puede hacer. Por eso, la plegaria diaria de la persona que quiere movilizar a la iglesia hacia las misiones debe ser, “Padre, abre los ojos de los líderes de nuestras iglesias a una visión misionera.” La oración es prioritaria en la movilización misionera. Pero también hay ciertas cosas que uno puede hacer para contribuir a un despertar misionero:

  • Hay que comunicarles a los pastores y a las iglesias las bases bíblicas de las misiones. La razón básica por la falta de visión misionera es que nosotros, como pastores, casi nunca predicamos sobre todos estos pasajes que hablan de las misiones, del corazón misionero de Dios. Calixto Patricio, misionero brasileño, dice “Si exprimimos la Biblia, sale misiones.” Si esto es cierto, ¿por qué es que el miembro promedio de nuestras iglesias sólo puede identificar 6 pasajes misioneros? Tienen que entender que el plan de Dios, y su deseo ardiente, es que las personas de todas las etnias, de todas las tribus, de todas las lenguas lo conozcan y lo estén adorando a Él. Dios es el centro de todo, y Él quiere que todos los hombres lo adoren a Él. Su deseo de que los hombres lo conozcan y lo adoren es la motivación primaria para las misiones, no la necesidad del hombre para la salvación. Tenemos que comunicar que nuestra relación con Dios está centrada en Él y en la adoración de Él, no en el hombre y sus necesidades.
  • Hay que darles una comprensión del estado de la evangelización mundial. Nuestros miembros tienen que aprender a ver el mundo desde otro punto de vista. Antes hablábamos de tener obra misionera en tal o cual país, como si por el mero hecho de tener misioneros en un país geopolítico, hubiéramos alcanzado a toda la gente de ese país. Por ejemplo, la iglesia bautista nigeriana ha crecido muchísmimo, pero descubrieron que de los más de 50 grupos étnicos en Nigeria, sólo cuatro estaban siendo alcanzados por nuestras iglesias bautistas. Tenemos que empezar a pensar en grupos étnicos, no en países geopolíticos. Los pastores y los miembros de nuestras iglesias necesitan entender la diferencia entre necesitar el evangelio y tener acceso al evangelio. Todos necesitan a Cristo, pero no todos tienen acceso al evangelio. Nuestros pastores y líderes tienen que entender por qué es urgente llevar el mensaje de salvación a la tercera parte de la población mundial que NUNCA ha tenido acceso al evangelio. Tienen que entender que desde hace más de un siglo y medio, el pueblo brasileño tiene acceso al evangelio, pero que ya no podemos quedarnos muy cómodos en nuestros templos, predicándole a la misma gente domingo tras domingo, cuando la tercera parte de la población mundial nunca ha escuchado acerca de Jesucristo.
  • La tarea de movilización tiene que hacerse primero con los pastores. Quizá a muchos no les gusta la frase del Hno. Edison Queiroz, pero creo que tiene razón cuando dice, “El pastor es la clave, o el clavo de las misiones.” Si el pastor no tiene esa visión, no podremos ir muy lejos en la movilización de su iglesia. No sería muy sabio, y probablemente sería imposible, compartir una visión misionera con la iglesia sin el apoyo total de su pastor. Así que la primera tarea será empezar a compartir la visión misionera con los pastores. Una vez que los pastores tengan la visión, el resto de la tarea será fácil. Esto no quiere decir que uno no deba promover la visión misionera primero a una audiencia amplia de la iglesia, pero sí que uno debe hacer un esfuerzo especial para incluir a pastores en esa audiencia, y el plan total debe incluir reuniones especiales exclusivamente para pastores y líderes. Reuniones para movilizar a las iglesias hacia las misiones no deben efectuarse con únicamente líderes laicos presentes. Siempre los pastores deben estar presentes. Actividades para apoyar este rubro podrían ser congresos, el predicar sermones misioneros en reuniones denominacionales nacionales o regionales, y predicar sermones misioneros en iglesias individuales. Cuando hay oradores misioneros disponibles, como ustedes los misioneros que están de licencia en Brasil en estos meses, o como Coordinadores de Estrategia para diferentes pueblos no alcanzados, se pueden programar reuniones especiales para personas que tengan interés en las misiones mundiales.
  • Tenemos que hacer un énfasis equilibrado sobre las cuatro esferas de Hechos 1:8. Si no, vamos a perder a muchos pastores, que sí tienen un corazón para alcanzar a su propia ciudad y a su país para Cristo. Hechos 1:8 nos dice que debemos estar trabajando simultáneamente en nuestra “Jerusalén”, en nuestra “Judea”, en nuestra “Samaria” y hasta lo último de la tierra. Hay casos en que una iglesia tiene una visión mundial, pero no está trabajando en alcanzar a su propio país. Pero hay más iglesias que solamente tienen visión para su ciudad, o para su país.

 

Consejería o Seguimiento Para Candidatos

Otra función de la movilización es dar seguimiento o consejos a los candidatos. Deben mantener contacto con los candidatos y estar al tanto de su progreso hacia la meta de salir al campo misionero. Deben proveerles dirección sobre cómo prepararse para el servicio misionero, cuáles opciones existen para entrenamiento dentro y fuera del país, y cuáles requisitos necesitan cumplirse. Deben ayudarlos a enfocar su atención sobre alcanzar el próximo paso en el camino hacia ser enviado como misionero. Si se le presenta la oportunidad, debe trabajar con las instituciones de preparación bautistas para que incluyan cursos y programas de entrenamiento dentro de sus planes de estudio para suplir las necesidades de los candidatos para ser misioneros.

El Movilizador debe trabajar con la iglesia, o el pastor, para estar seguro de que el candidato esté siendo preparado ampliamente en su desarrollo físico, espiritual, psicológico, ministerial y vocacional. Para ser efectivo en esta parte de su ministerio, debe:

  • Tener un concepto claro del proceso que el candidato debe seguir para llegar a ser misionero. ¿Cuáles son los pasos concretos que tiene que tomar? Me imagino que la Junta de Misiones Mundiales tiene bien definido el proceso que un candidato debe seguir para llegar a ser enviado por la JMM. Tienen que comunicar ampliamente estos pasos, los requisitos educacionales y de experiencia, etc. Tiene que haber personas que estén llevando un “control” de cada candidato para saber en dónde se encuentra en su proceso.
  • Entender la importancia de animar a los candidatos a estudiar una profesión o carrera universitaria. En la mayoría de los países con grupos no alcanzados, es indispensable tener una profesión para lograr la entrada dentro de una “plataforma” secular. También debe animar a los candidatos a estudiar otro idioma, como el inglés o el francés, para que pueda comunicarse al viajar, y para poder comunicarse con otros colegas en equipos multinacionales. En muchos países los idiomas locales sólo se enseñan por medio del inglés.
  • Tener la convicción de que la iglesia local tiene que tomar el liderazgo en la formación primaria de los misioneros. La iglesia local debe trabajar bien el asunto de carácter, darle un discipulado adecuado de tal forma que el candidato sea un cristiano maduro, y debe entrenar al candidato en los fundamentos de plantación de iglesias células que rápidamente se reproduzcan.
  • Tener a mano la información sobre opciones de entrenamiento misionero que existen en su país, o en países cercanos. No debemos, si es posible, duplicar lo que otros grupos ya tienen funcionando.

 

El Discipulado Misionero de las Iglesias

Una vez que una iglesia tenga una visión misionera y tenga interés en desarrollar esta área de la vida de la iglesia, el Movilizador debe empezar a discipular a la iglesia en el área de las misiones. Esto implica recibir él mismo un entrenamiento sobre cómo guiar a una iglesia a proveer formas personalizadas de trabajo misionero. Tendrá que desarrollar o adaptar para su propio país programas existentes para el discipulado misionero de una iglesia. En Meso América y el Caribe estamos usando Impacto Global, una adaptación del material Enfoque Global.

Básicamente se trata de:

Si hay interés, podemos ver más detenidamente más adelante el contenido de ese programa Impacto Global que usamos.

Un discipulado misionero significa ayudar a la iglesia a profundizar su visión y su comprensión de las misiones, desarrollar una Declaración de Propósito basada en la Biblia, evaluar cada aspecto del programa de la iglesia a la luz de esa Declaración de Propósito, y establecer las misiones como la tarea principal de la iglesia.

Significa ayudarle a la iglesia a desarrollar un Comité de Misiones que realmente funcione. Significa ayudarle a la iglesia a entender las implicaciones de enviar a misioneros. La iglesia tendrá que desarrollar la estructura necesaria y formular políticas adecuadas antes de enviar a su misionero al campo.

Un discipulado misionero también significa trabajar con el candidato para ayudarle a establecer su propia estructura de apoyo, ya sea en su iglesia de origen, o de entre el grupo de iglesias que lo estará sosteniendo. El Movilizador debe cerciorarse de que tal estructura no se limite únicamente a lo financiero, sino que incluya una gama completa de apoyo, especialmente de oración.
El Movilizador debe trabajar con la iglesia para implementar la “personalización” en las misiones. La personalización incluye lo siguiente:

  • Que en la iglesia cada creyente está ministrando según los dones espirituales que el Espíritu le ha dado
  • Que la iglesia tenga contacto personal con los misioneros y los proyectos misioneros que apoyan, y que se sienta responsable por los misioneros
  • Que los miembros de la iglesia estén participando personalmente en los diferentes aspectos de las misiones (aprender, orar, ofrendar, ir).
  • Que haya una variedad amplia de opciones para involucrarse en las misiones para cada persona en la iglesia

“La participación directa de congregaciones en el campo misionero ha acelerado la cosecha evangelística y aumentado el impacto de nuestros misioneros alrededor del mundo. Ha sido un factor clave en el crecimiento sin precedente del número de misioneros enviados en los años recientes. Ha contribuido al aumento significativo de la oración intercesora para nuestros misioneros y para las naciones. La mayoría de los pastores testificarían también que el involucrar a sus miembros en las misiones internacionales ha resultado en un mayor compromiso hacia testificar a los no creyentes localmente.” — Jerry Rankin, Presidente de la Junta de Misiones Internacionales de los Bautistas del Sur.

Más que nada, un discipulado misionero significa que el Movilizador esté disponible para facilitar la transformación de los conocimientos adquiridos en acciones concretas. Estamos muy dados a incrementar constantemente nuestros conocimientos, sin preocuparnos por poner en práctica lo que estamos aprendiendo. Lo mismo sucede en el campo de las misiones. A veces hace falta quien “presione” (en el buen sentido de la palabra) a la iglesia a llevar a la práctica lo que ha aprendido. TODO LO QUE SE HA VISTO EN IMPACTO GLOBAL o material semejante.

¿Cuáles son algunos de estos campos en que hay que trabajar en un discipulado misionero con iglesias locales?

  • La iglesia debe desarrollar un plan de discipulado y de obra práctica para las personas que dan testimonio de que Dios los está llamando a las misiones. Debe asumir su responsabilidad en ayudar a identificar a quienes Dios está llamando y cuándo es el tiempo propicio para salir a otros países. Ni en el caso de ese primer viaje misionero en el Nuevo Testamento todo el equipo tenía la madurez espiritual necesaria. Hechos 13:13. Juan Marcos nunca debió haber ido con ellos.
  • Este papel de la iglesia incluye fomentar su preparación, su madurez espiritual, y su confiabilidad. La iglesia tiene que trabajar con el candidato antes de que se vaya para asegurar su crecimiento espiritual.
  • La iglesia tiene que seguir trabajando con el misionero mientras está en el campo misionero para propiciar su salud espiritual y crecimiento espiritual.
  • Establecer un sistema para informar sobre su trabajo. El misionero tiene que ser responsable no sólo a la estructura en que está trabajando, sino también a su iglesia. Es importante tener que darle cuentas a la iglesia por lo que está haciendo. El misionero sigue siendo parte de la iglesia que lo envía y debe rendir cuentas por lo que hace.

 

Promoción de Oración y Comunicación

Una de las cosas más importantes que debe empezar a promover desde el principio sería desarrollar una red de oración a favor de las misiones, y a favor de los candidatos y misioneros en el campo. Debe desarrollar un sistema para compartir noticias, información, y solicitudes de oración, tan ampliamente como sea posible. Este sistema debe incluir redes para correo electrónico, redes de faxes, y redes telefónicas. Debe reclutar a personas en cuántas iglesias sea posible, que estén dispuestas a servir como contactos locales a los cuales podrá pasar la información y solicitudes de oración. Estas personas serán responsables por compartir la información en su círculo/iglesia.

La Junta de Misiones Mundiales, presenta muchas cartas de sus misioneros en su página de Internet. No sé si además, tienen redes de oración por correo electrónico. Pero cada misionero debe ser animado a desarrollar su propia red de oración. En Meso América animamos a nuestros misioneros a intentar llegar a 1,000 intercesores. Sabemos que hay por lo menos 700 personas orando por cada uno de nuestros misioneros.

El papel de los “guarda metas” o “porteros”en la comunicación

Debido a los asuntos de seguridad que están involucrados en la comunicación a personas que viven en países de acceso restringido, debe aprender a comunicarse dentro de las restricciones de seguridad. Necesita saber cómo presentar a oradores que vienen de tales países, y cómo desarrollar materiales impresos que no pongan en peligro las vidas y ministerios de los misioneros que ministran en lugares restringidos. Puesto que probablemente algún día se verá en la necesidad de comunicarse con gente en países de alta seguridad, debe obtener la tecnología PGP (Pretty Good Privacy) o ayudarles a los porteros a obtener acceso a servidores y servicios de correo electrónico seguros. Si usa PGP, debe aprenderlo bien y estar listo para entrenar a otros en el uso de la comunicación encryptada. http://www.pgpi.org/

Parte importante de esta faceta del ministerio de movilización es la enseñanza a las iglesias de la guerra espiritual. Aunque nosotros, los bautistas, decimos que creemos en la existencia y el trabajo de Satanás, pocos miembros de nuestras iglesias realmente comprenden la importancia de guerrear en la oración para liberar a los no creyentes de la esclavitud a que están sometidos. Muy pocas personas saben cómo importunar en la oración (como la viuda y el juez injusto) como una forma de hacer la obra misionera.

Si no tienen materiales a mano para compartir con las iglesias sobre cómo pelear en oración intercesora la batalla espiritual, deben buscar, o escribir, materiales.

La tendencia de los misioneros es no querer alarmar, o no querer hacer que un “problemita” parezca ser un problema muy grande. Pero la experiencia nuestra ha sido que muchos misioneros esperan hasta demasiado tarde para pedir oración.

Enlace con Oportunidades de Servicio

Es probable que esta función de la movilización sea más que nada una función de la Junta de Misiones Mundiales. Sin embargo, aún la JMM puede necesitar trabajar este campo un poco más. Hay que desarrollar una red de contactos no solamente con gente de su propia Junta, sino con otros equipos bautistas y otros evangélicos en todas partes del mundo para poder colocar a los candidatos a medida que ellos se acerquen al tiempo de salir al campo.

Hemos descubierto la gran ventaja de colocar a nuestros misioneros en equipos. Por lo menos en el resto de América Latina no tenemos la estructura necesaria en diferentes partes del mundo como para colocar a nuestros misioneros únicamente en equipos Latinos. Estamos aprovechando estructuras bautistas y de otros evangélicos ya existentes para colocar a nuestros misioneros en equipos.

Ya pasó la época del Llanero Solitario en las misiones. Hay mucho valor en formar equipos multinacionales. Pero para esto hay que mantener una base de datos de equipos dispuestos a recibir a latinoamericanos.

La experiencia nuestra ha sido que el hecho de difundir información sobre las oportunidades de servicio disponibles muchas veces despierta el interés de las personas que están escuchando un mensaje sobre las misiones. No deben guardar esta información para comunicaciones privadas entre la Junta y los candidatos. En formas generales esta información debe compartirse ampliamente./

Fuente de Recursos (conocimientos, contactos, experiencia) A medida que las iglesias se interesen y se involucren en las misiones, el Movilizador debe servir como una “persona de recurso” que ayude a encontrar la información que necesitan, que los enseñe cómo funcionar, cómo establecer políticas, cómo definir requisitos, etc.  Los movilizadores, o alguien en la Junta de Misiones Mundiales, deben encargarse de estar constantemente buscando artículos, videos, información y materiales para las iglesias y colocando estos recursos al alcance de todas las iglesias y las personas encargadas del ministerio de misiones en ellas.

Dinámica de Grupo En sus grupos de cinco, hablen de lo que se está haciendo en cada uno de las siete funciones de la movilización. Luego den sugerencias sobre acciones que deberían estar tomando en estas siete funciones de la movilización. Nombren a un(a) secretario(a) para tomar apuntes de las conclusiones a las cuales llegan en su grupo.

Escritor por Lloyd Mann

Fuente: Junta de Misiones de la Iglesia Bautista